La vacunación es fundamental en la infancia, demostrando su eficacia en el control, eliminación y erradicación de enfermedades inmunoprevenibles. Un esquema de vacunación con una cobertura del 95% o más es crucial. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año, la vacunación previene aproximadamente 2.5 millones de muertes, permitiendo que los niños estén protegidos y alcancen su máximo potencial de desarrollo.
Cronograma de vacunación
La efectividad de la vacunación depende de dos factores clave: el momento de la administración y el intervalo entre dosis. Para garantizar esto, se ha establecido un calendario vacunal que indica cuándo y qué vacunas deben administrarse en determinadas edades. Este calendario permite a las entidades de salud tener un control preciso sobre las vacunas administradas a la población, garantizando una cobertura adecuada.
Estrategia y programas
Los programas de vacunación se adaptan a las necesidades de cada país, con un enfoque en la prevención como estrategia rentable. En Colombia, el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) establece el esquema nacional de vacunación para eliminar, controlar y erradicar enfermedades inmunoprevenibles, especialmente entre la población infantil. Además de los niños menores de 5 años, el PAI también aborda otras poblaciones, como:
Niños menores de 1 año y hasta los 5 años afiliados a los regímenes contributivo y subsidiado.
Niños mayores de 5 años que deben recibir vacunas específicas en áreas de riesgo afiliado a los regímenes contributivo y subsidiado.
Mujeres gestantes para inmunización antitetánica afiliada a los regímenes contributivo y subsidiado.
Población mayor de un año en todas las zonas de riesgo para fiebre amarilla afiliado a los regímenes contributivo y subsidiado.
A continuación una tabla que muestra las vacunas principales con la edad y dosis respectivas:
Tomada de: http://www.sinergiasong.org/cajasdeherramientas/mildias/esquema.html
Algunas de las metas que este programa busca cumplir son
Vacunar con Antipolio, D.P.T., B.C.G., Anti-Hepatitis B y Anti - Haemophilus influenzae al 100% de los niños menores de un año.
Vacunar con Triple Viral al 100% de los niños de un año y aplicar un refuerzo al 100% de ellos al cumplir los 10 años.
Vacunar con Toxoide Tetánico - Diftérico al 100% de las mujeres en edad fértil residentes en áreas de riesgo para Tétanos Neonatal y al 100% de las gestantes del país.
Aplicar una dosis de vacuna Anti- Amarílica al 100% de población mayor de un año residente en zonas de riesgo.
Garantizar vacunación gratuita y obligatoria a toda la población colombiana objeto del PAI
Es importante que los padres estén pendientes de las vacunas de sus hijos para que cumplan con todo el esquema de vacunación y de esta forma evitar que contraigan alguna enfermedad grave o letal, siempre teniendo presente llevar el carné de vacunación al momento de aplicar una dosis.
Reglas generales
El PAI establece algunas pautas importantes para todos:
Para los viajeros internacionales, la Triple Viral y la fiebre amarilla pueden administrarse simultáneamente o con al menos 4 semanas de diferencia.
No se recomienda la administración simultánea de vacunas contra cólera y fiebre amarilla, debido a una posible disminución en la respuesta inmunitaria.
Nunca se deben mezclar dos vacunas en la misma jeringa, a menos que lo indique el laboratorio productor.
Aunque aumentar el intervalo entre dosis de una vacuna no reduce su eficacia, reducirlo puede interferir con la respuesta inmunitaria y la protección que brinda la vacuna.
Estos lineamientos son esenciales para garantizar la calidad de vida y la protección de la salud, especialmente para los niños. Además, son importantes para todos, ya que refuerzan nuestro sistema inmunológico y nos protegen de enfermedades específicas.
¿Por qué es crucial asegurar la vacunación en niños menores de 5 años?
Asegurar la vacunación en niños menores de 5 años es crucial debido a varias razones fundamentales. En primer lugar, los niños pequeños poseen un sistema inmunológico aún en desarrollo, lo que los hace altamente vulnerables a enfermedades infecciosas.
Las vacunas desempeñan un papel vital al fortalecer su sistema inmunológico y protegerlos de enfermedades potencialmente graves o incluso mortales. Al seguir el calendario de vacunación recomendado, se les brinda una protección temprana y duradera contra enfermedades como el sarampión, la poliomielitis, la tos ferina y el tétanos, entre otras.
Además, la vacunación es esencial para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas en la comunidad. Al vacunar a los niños, no solo se preserva su salud individual, sino que también se contribuye a establecer una inmunidad colectiva conocida como inmunidad de rebaño. Esto implica que cuando la mayoría de la población está vacunada, incluso aquellos que no pueden recibir ciertas vacunas debido a razones médicas están protegidos, ya que se reduce significativamente la propagación de los patógenos.
Otro aspecto crítico es que la vacunación puede prevenir complicaciones y secuelas a largo plazo. Algunas enfermedades infecciosas pueden causar daño permanente a órganos vitales, afectar el desarrollo neurológico o provocar discapacidades a largo plazo. La vacunación oportuna y completa juega un papel fundamental en la prevención de estas complicaciones y garantiza un crecimiento y desarrollo saludables en los niños.